A nivel internacional, hay estudios que muestran que si bien sistema contable aporta considerablemente a la disminución del nivel de riesgo, hay tres elementos esenciales a considerar en la evaluación del Crédito Empresarial:<o:p></o:p>
Condición financiera (Cuentas por Cobrar, Proveedores, Efectivo, Dividendos, Pasivos Corrientes, Activos Corrientes, Capital de Trabajo y Patrimonio Líquido)<o:p></o:p>
Cumplimiento (antecedentes crediticios)<o:p></o:p>
Demografía empresarial (Sector, tamaño, año de fundación, socios o accionistas, antigüedad de sus directivas, historia, ubicación)<o:p></o:p>
Limitar el análisis crediticio a uno o dos de los anteriores reduce la exactitud de la evaluación y es aceptable únicamente para efectos de evaluar créditos nuevos de bajo monto o con el fin de monitorear a clientes antiguos de bajo riesgo, que no tengan una alta participación en el volumen de ventas de la empresa acreedora y sobre los que no se sospechen anomalías.